En el peor momento político de la historia, la dictadura militar de Videla, la albiceleste y los naranjas disputaron la final del certamen. Por Mundiales Argentina y Holanda se enfrentaron en tres ocasiones. La última de estas fue el empate 0-0 en el cierre de la Fase de Grupos, con ambos elencos ya clasificados a octavos de final, en Alemania 2006 con José Pekerman como entrenador. Horas antes, el organismo rector del fútbol había informado que proporcionó a la policía las listas de números telefónicos de su personal y prestadores de servicios, incluido Match.
Es injusto señalarle por esa acción, y más tras su actuación, pero así es el fútbol de injusto con los porteros. Fallaron sus guantes una sola vez, aunque eso quedará en los escritos. El ramillete de ocasiones fue tan florido que no es de recibo aburrirles con el relato de los mismos. Sólo decirles que el espectáculo fue vibrante, como deberían ser todos los partidos llegados a este punto. Es más, jugadores como Vertonghen y De Bruyne tuvieron mayor ascendencia sobre el juego belga que la estrella del Chelsea. A esto se suma que Origi, titular en detrimento de Lukaku, no tuvo su día como finalizador de las constantes acometidas belgas.
Messi, ojos cerrados, en el centro del universo, en la intimidad con Lloris, al que el amago del rosarino le hizo caer en dirección contraria al pase a la red del capitán albiceleste. El sexto gol del rosarino, el cuarto de penalti tras haber fallado el segundo que tuvo en Qatar. Sublime en el último tramo Mbappé, autor de tres goles. Tras Brasil 2014, el destino le concedió un partido de vuelta para glorificar hasta el infinito a un futbolista único. Porque único es quien a los 35 años, tras una carrera en la que se exigió ser Messi todos los días, se reencarna en aquel Leo que jugaba por una bicicleta animado por la abuela Celia. La treintena tenía el rey Pelé en su majestuoso Mundial de 1970.
Argentina llega tras vencer en su primer partido a Iraq tres goles a uno, un partido bastante movido dónde los argentinos lograron sumar. Ezequiel Fernández buscará generar bastante daño en este encuentro, el jugador suma una diana, además de que siempre está pendiente al frente para lograr conectar jugadas peligrosas. Ambas escuadras ya están en el terreno de juego realizando calentamientos previos al inicio de esta justa. Marruecos ya metió gol y se cierra bastante el grupo, ambos equipos irán por la victoria. Debido al constante crecimiento de la FIFA, se han creado a lo largo de la historia seis confederaciones regionales, cuyos objetivos son similares a los de la FIFA.
Así pasa que muchos partidos recorren senderos inesperados, con giros argumentales casi inexplicables para cualquiera que no haya sudado la camiseta alguna vez sobre un terreno de juego. El segundo tiempo parecía a la medida de la Argentina, que no supo aprovechar los espacios de un equipo belga que tenía que salir a buscar. Pudo haber un gol antes para liquidar el partido y no sufrir hasta el final, como en esos cinco minutos adicionales. Va de menor a mayor y ya está entre los cuatro mejores para empezar a ilusionarse. Empezó muy bien con el gol de Higuaín, luego de una jugada de Leo, que hasta recuperó el balón, un dato no menor, y un pase de Di María que rebotó en un jugador belga. Messi está jugando el Mundial que tanto se le reclamaba.
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